La visita al Delta del Ebro nos ha deparado varias agradables sensaciones,
como saber de un espacio natural protegido lejos de los grandes bullicios
turísticos y con un sabor tradicional arraigado, además
de ser un gran nicho ecológico de multitud de especies orníticas
valiosísimas. Pero además pudimos disfrutar de la compañía
y guía de un gran fotógrafo y amigo, Juan Gil Raga,
que nos hizo de anfitrión en una tierra que conoce muy bien
y de la que ha obtenido las grandes fotografías de su archivo
que muchos conocemos.
Siempre
es un verdadero placer conocer los lugares más bellos de nuestro
país de mano de quién mejor los conoce, pero además
cuando es a través de Juan, un verdadero guía del Delta,
hay que descubrirse.
Nuestra
visita al Delta estuvo aliñada con ali-oli de paella, una casa
tradicional donde pudimos alojarnos por muy buen precio, y la simpatía
y cariño de las gentes del Delta, a las que saludamos desde
esta web y las recordamos con cariño.
Volveremos.